Qué hacen tus manos trayéndome de vuelta,
déjame ahí,
donde el sol deshiela los pastos
déjame ahí,
donde el sol deshiela los pastos
cenizos en turquesas blandas.
no te puedo ver,
si acaso percibo la bruma del mar
como nubes derretidas en la arena.
Qué hace tu voz despertándome sin muerte,
tengo miedo,
tengo miedo,
preferir el vacío indoloro interminable
del ahogo que me salvas sin un beso.
Buenos Aires; 08 de junio de 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario